Open de Australia 2016, Kerber-Konta: Buscando un imposible (7-5 y 6-2)

Angelique Kerber. Ejerció de favorita en su semifinal ante la debutante Johanna Konta, poniendo tope al sueño de la joven debutante. Después de eliminar a Victoria Azarenka demostró tener la entereza suficiente para no dejar cabida a ninguna sorpresa y solventó (con algún apuro que otro en el primer set) un choque que la lleva directa a citarse contra el terror del circuito en la final: Serena Williams.

Johanna Konta. Comenzó a asomar la cabeza en Nueva York y en Melbourne ha tirado la puerta abajo. La referencia del tenis británico deja de ser Laura Robson para dejar hueco a Konta, la británica nacida en Australia que entrena en Gijón a las órdenes de Esteban Carril. Este año puede ser el de su establecimiento en la élite, y en Roland Garros habrá muchos ojos puestos en ella. En la semifinal superó la barrera de la veintena de errores no forzados, lo que terminó penalizándola.

Después de la exhibición de Serena Williams, el turno matinal en el Rod Laver Arena lo cerró una semifinal en la que hubo nervios y emoción durante el primer set. Se medían Johanna Konta, la gran revelación del torneo, y Angelique Kerber, la tapada entre las principales cabezas de serie, pero la superviviente final de todas ellas. Kerber, mucho más curtida en torneos grandes que Konta, aprovechó los nervios de la británica nacida en Sídney para recibirla con una rotura de saque. A partir de ahí, la alemana se bloqueó y Konta volvió a mostrar su tenis sin complejos para devolver la igualdad al marcador, igualdad transitoria, pues a Kerber le dio tiempo de reengancharse al partido a tiempo para sellar el primer set a su favor sin necesidad de llegar al tie break (7-5).

No hubo una nueva campanada en Melbourne y Johanna Konta se queda a sólo un paso de la final en su primera participación. Angelique Kerber demostró atravesar un buen momento de juego (fue finalista en Brisbane) y llega a la final frente a Serena Wiliams con todas las apuestas en contra y sin nada que perder. A su favor, la presión que pueda acusar la estadounidense teniendo al alcance los 22 Grand Slams de Steffi Graf.